lunes, 6 de octubre de 2014

+ otro corte

//mientras dure esta altura la calle
será nuestro agujero
arracimados bajo el latir
del rayo verde
quieren mirar
lo que la historia negará
y es un acto de arrojo
y es un acto de muerte
voces gringas sonríen desde la cámara
una facilidad sucede por fuera de sus nombres
el camarógrafo
es un vigía insospechado bajo la sombra
de alguno
a la noche, sólo se hace rapaz
acaso tiene un número
una risa pero sin ancla, hilo ni verdad
esta piedra escuchó los escuadrones acercarse
y la granadería
apenas se escondían en las habitaciones
ponían el tocadiscos
y empezaba a restallar.
Esta mañana eres libre mas no de tu libertad.
Quemazón de los frutos torpedeando
su trayecto de savia
olas exactas de circulación. No son
misivas ni llevan códigos en transparencias,
sólo un silencio raro.// otro corte 6-oct.-2014


viernes, 3 de octubre de 2014

no son misivas ni llevan códigos en transparencias, sólo un silencio raro

/// estaba sangrando a lo largo del río
mañana indecisa entre el rojo y el negro
entre el negro y el blanco
allí me esperan,          del
lado del metal
para salir airosos   enfriarán la mía
dos de octubre nubes de Tlatelolco
su cielo rojo y negro
y su posterior cielo blanco
con un rayo verde dibujado
ojos que lo vieron
ojos que ven aquí
la mansa tormenta       de los frutos
su violencia inconsciente
la electricidad del sol
para la chapa
no es nunca suficiente
tras la puerta franqueada por una cámara
solo hay un descampar
dos perros se comen una liebre entre la bruma de un año
allí donde la cámara no puede registrar /// Corte 2-oct.-2014




sábado, 6 de septiembre de 2014

no tienes que ser sincera, muchacha




mi cuerpo está cargado de veneno
el veneno son mis huesos produciendo dolor lo
fabrican despacito como para que no me dé cuenta
al principio
pero a cada segundo lo puedo notar
son millones de agujeros
que caben en cualquier lugar
su mayor alimento es mi propia reticencia
no me van a abandonar
son mi sola compañía
y sobre lo que el otro día no anoté
tengo que decir que
fue lo más importante que ocurrió
era algo acerca de la voz de una adolescente
que entró al bar donde tomaba una copa
la voz de la adolescente era grave
como una grieta
como la cueva que vi en una playa de galicia
y que tenía piel de lapas y pequeñas pezuñas de mar
era espectacular
la voz, me refiero
no pude evitar sentirlo
creo que así fue
no me sentí mal porque verás
me acordé de pasolini y de los catorce
del riccè
en lo del arrollo
como tenía miedo de despertarme y no poder mover las manos
un día me desperté y dejé de moverlas
no tienes que ser sincera muchacha
me digo
y cambio un poco la frase:
para las niñas de la vida
la verdad no hará dominio
así me gusta y de la otra manera me rompe
pero es un secreto mío
así que no lo voy a poner
lo importante es saber que la verdad no hará dominio
de ninguna manera lo hará      para las niñas del barrio
me digo
entonces salen las nubes
haciendo alvéolos blandos hacia abajo
parecen pequeñitos
duodenos de
un cachorro del cielo
eso quise mirar
apretando mis manos entre los muslos
para hacer como que no existían
mientras un chico sacaba fotos
del arco de color
en el asiento de al lado

jueves, 17 de abril de 2014

los ángeles y las pibas marinas








las terminaciones nerviosas de la cabeza
están vibrando como serpientes descabezadas
al ritmo de marine girls y luego de los ángeles azules
tenemos muchas terminaciones nerviosas en la cabeza
van coincidiendo con los poros y los pequeños hoyos peliculares
es una fiesta de puntos
que tal vez tengan distintos formatos a niveles microscópicos
pero que desde acá sólo pueden imaginarse como miles de
 puntos pequeñitos  unos junto a otros

                     dije que iríame a nadar
aunque no sé
hacen grados bajo cero
hay nieve en los tejados
y no asoma ni un gramo de sol
las voces agudísimas de las mujeres del sur
y de algunos hombres del sur como el cantante de los ángeles azules por ejemplo
las voces gravísimas de los amigos que se exiliaron al berlín
y luego la nocturnidad del cuarto
mamá  sacándome las liendres de la cabeza
durante horas
 bajo susurros







viernes, 20 de diciembre de 2013

cosas que pasan en las ofis y en los pueblos


entonces estaba un día arribando a la funesta -véase su particular fosfórica presencia- ahí estaba yo[1] detrás del mostrador de recepción y sonó el cascareo de unas patitas contra lo del suelo plástico de la funesta, era una lagartilla temblequeando por la ofi, iba de sombra falsa a falso techo a falsa planta y le puse una caja de lápices arriba de su cuerpo para protegerla porque la querían matar. así le puse la cajita transparente por encima pero la cola se desprendió, juro que no la corté, que no la corté, juro que apenas toqué. la cola se desprendió. heme ahí, llorando voy por la cola recién mutilada de la lagartilla mutilada y luego la recojo del suelo una vez acabados los espasmos con el dedo índice y con el pulgar y la pongo en la papelera  bajo el escritorio[2]. ahí se pudre el cachito de su cuerpo, siga viva la pieza, suéltela en el bosque al lado, entre pajizos señores trajeados que son como duendes señor, como daimons, señor. también conté algo sobre los días en que insultaba a tipos en bicicleta que decían guarradas mientras se alejaban. siempre dicen puta, pero da lo mismo, yo les digo, que le den por culo a tu puta madre o algo como eso lo más feo que salga y corro con puños otra vez, llego al fatigado puente, cruzo el río, un mendigo inglés me saluda con la mano y dice hello, etc.,  y yo corro y corro por el puente hasta llegar al tren, pararme ante los vidrios ahumados, colocarme con los dedos el peinado, y luego me piro a la funesta, a matar lagartos esta vez, oh sí!




[1]hola, esto es un experimento sobre lo del tono confesional y eso
[2] una vez se murió un pez que había cogido en el río. lo traía en una bolsa de plástico con agua del río y entonces se puso a flotar en la burbuja de aire que había arriba de la bolsa rellena de agua del río. supe entonces que se había muerto, pensé que yo lo había matado y como no sabía qué hacer con el cuerpo lo tiré por el balcón y me fui corriendo, creo que para imaginarme que volaba. al día siguiente la vecina de abajo encontró un cadáver de pez de río en su balcón y todos lo comentaban sin parar en los rellanos pero yo no dije nada, bah, ni pío. oh, siempre será un misterio, lo habrá traído un gaviotín, pero estamos tan lejos del mar, ¿los pájaros de río no cazan?, cazarán señora cazarán, pero a qué venir aquí, a la calle principal, a soltar su merienda, etc., etc.

lunes, 29 de julio de 2013

hola, bienvenidos a Elmercado


Cuchita vive en un valle de carcas
ya no me importa ni engordar ni no comer ni ná, digo, Cuchita
si me paso el día enterito encerrada en esta guarida contra carcas
los carcas amenazan constantemente, cierran todo con llaves
verás, los carcas viven en puros hospitales
ahí, algunos más caros, otros más malolientes,
el barrio está infestado de hospitales y de hogares de avis, no aves, que significa abuelos
tout contraire, cero pajarística como decía,
en el barrio también hay ladrones
Cuchita habla con uno
y tú qué caqueas? No, en realidad no le responde, era de esperar
será un carca también, se dice
y  vira. Punto.
Digo, en uno de los puntos más elevados, como veréis por allí
hay hasta mecánicas escaleras para los avis, te creerás, están resplandecientes

miércoles, 27 de febrero de 2013

cómo es posible, no sé, pero es así




                                         ojos removiendo la luz adentro
                                         hasta el pánico por ceguera
                                         tanto bulto rojo contra el seso


el caso más complicado era tener
la lengua rota por otra lengua
a su nivel no orgánico
una sensualidad del secreto
como un puño enfundado
un guante de hierro
en el ejercicio del golpe
máquina que te escribe el delito
a clavos contra el cuerpo
hasta filtrar la sangre entera
en un foso de sal
los animales atienden
que le jodan a la literatura mundial
si no te atreves a callejear
para vender tus trucos
te morirás de hambre
la historia del tipo crudo
que se cruzó rectos muros
fusil en mano
y en la boca
un verso oído de la mano de la madre
de la mano de la abuela de la madre
de la raja del suelo de la aldea
del puño enterrado en el seno del árbol
corrompido por buitres